sábado, noviembre 23San José, Uruguay
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Lo que el tenis no estaba preparado para ver

Cada partido que encuentran como rivales directos a Federer, Djokovic y Nadal, revive la polémica de cual de estos tres será recordado como el mejor de todos los tiempos en la rama masculina.

En esa polémica quizá pase por alto un detalle no menor: disfrutar de la presencia de leyendas en el circuito es un privilegio mucho más relevante que la discusión basada en criterios subjetivos relacionados a la preferencia personal de cada espectador de tenis.

De cualquier manera, nadie duda en llamar de «triunfo épico» lo realizado en las últimas horas por el serbio ante el suizo. Es que, más allá que en principio tenía un leve favoritismo antes del juego, fue Federer el que sacó mayores ventajas en el trámite del partido, aunque con mucho ímpetu y concentración Djokovic llevó la definición hasta más allá de lo pensado.

Incluso, en el último set, lo tuvo Federer con dos match points, pero mostrando una gran fortaleza mental y mucha resiliencia, el serbio ganó el partido en tie-break y el trofeo de Wimbledon. Algunos especialistas dicen que fue la mejor definición de la historia del clásico torneo disputado en Londres, Inglaterra.

Luego de esta definición, final que nos tuvo inmóviles frente a la pantalla de TV mientras dos gigantes se disputaban la gloria punto a punto, Djokovic entró al selecto grupo de los más ganadores de Wimbledon en la era abierta: Roger Federer (8), Pete Sampras (7), Bjorn Borg (5) y Novak Djokovic (5).

Por otra parte, sin dejar de hacer mención nuevamente al privilegio que tenemos los que hoy disfrutamos del escenario del tenis actual, Federer continúa siendo el más ganador de Slams con 20 torneos, seguido de Nadal con 18 y Djokovic con 16. La fortaleza anímica del serbio, hoy actual número 1 del ranking, y la homogeneidad de su performance en todas las canchas hacen dos factores que lo dejan bien posicionado para seguir avanzando en las tablas históricas de los máximos ganadores del tenis mundial.

Como muestra, en encuentros directos, el serbio ha ganado más juegos ante el suizo, al igual que ante el español. En esta oportunidad, nos deleitaron con una histórica final de 4h55m. La final con mayor duración del torneo, casi 5 horas del mejor nivel de tenis planetario.

Vivimos una excepcional realidad del tenis. Lo cruel no es ver a Federer con 37 años perder en el quinto set en tie-break, o ver a Djokovic prácticamente derrotado luego de tanto esfuerzo en la cancha, o a Nadal con gestos de dolor cuando el físico le juega una mala pasada. Lo cruel es saber que estamos cada vez más cerca de llegar al punto que nadie quiere, el punto final.

Disfrutemos. La discusión será posterior.

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