El abasto ganó y trepó a la línea de los siete puntos en el Apertura
Treinta y Tres recibía como local a River Plate en un arranque desparejo de ambos en el Apertura, los dos en una zona media de las posiciones pero con más encuentros jugados que la mayoría, era importante para los dos vencer para acercarse al objetivo de clasificar a playoffs. El primer tiempo fue peleado, enredado, con poco juego en los dos, destacándose en esa faseta lo hecho por Ignacio Falero y Sebastián Lavega en la visita, que eran los más claros del partido. El local no se encontraba más allá de la intensidad para luchar cada pelota, los arqueros quedaban muy lejos de las acciones salvo en un par de llegadas puntuales del albirrojo, y una del azulgrana que terminaría siendo el tanto. Se acercó el elenco de Jairo Reyes primero en un disparo de «Nacho» Falero con zurda de media distancia que se fue ancha contra el palo derecho, y en la más clara hasta el momento un cabezazo en el área chica de Joaquín Lapizaga que no pudo tomar fuerza y terminó manoteando para agarrar posteriormente. A poco del final, cuando muy poco en el cuarto de cancha final había hecho, una pelota quieta le trajó soluciones a los dirigidos por Ricardo Machado. Levantó desde lejos pasado al segundo palo Javier Cerdeiro, salió Emanuelle Silva con los puños y logró rechazar pero se encontró con un rebote en Nicolás Carera que llegó prácticamente a la misma vez, le cayó a Manuel Barceló que sin marca y con el arquero lejos de la meta solo la tuvo que empujar.
SEGUNDO TIEMPO: El complemento fue mas entretenido, algo mejor jugado, y con más espacios. River Plate lo fue a buscar desde el comienzo y por momentos llevó el juego a la zona defensiva rival, las ideas no abundaron pero nunca perdió las ganas, y alguna opción tuvo. Una corrida en diagonal desde la izquierda hacia adentro de Maximiliano Martínez le dio disparo cruzado que atrapó seguro Almada, en la siguiente giró Lapizaga dentro del área y se encontró con el espacio de tiro, probó al poste zurdo y otra vez el golero estaba bien parado para contener. Parado para atacar rápido, y con jugadores veloces ideales para ese estilo, Treinta y Tres pudo haber liquidado, ante un rival que con el correr de los minutos cada vez se expuso más en su zona final. Una gran jugada de Joel Angelillo por izquierda fue chance inmejorable, mucho mérito del zurdo en el armado para correr primero por banda y luego paralelo a la raya de fondo pasando marcas, la sacó atrás y se pasaron todos por lo que le cayó a Agustín Pérez que acompañaba del lado opuesto y de frente, el disparo iba con destino de gol pero Silva atajó de manera espectacular. En la recarga el club del Barrio Industrial tuvo la última clara que consiguió generar, un robote le quedó al juvenil Juan Menéndez quien tiró dentro del área pero algo mordido, adivinó Almada que se volcó al parante y volvió a tapar. El final fue intenso, con la visita muy jugada pero sin llegar con peligro real, y ya en descuentos el local fallando una chance increible, en la que Bruno Núñez quedó mano a mano con Silva y lo eludió brillante, cuando quedó con la portería a su merced tiró con zurda y pegó en el vertical. No hubo tiempo para nada más, ganó de buena forma Treinta y Tres que en el primer tiempo llegó poco pero concretó, y en el segundo justificó el triunfo con un buen trabajo defensivo y varias opciones para sacar una ventaja mayor.
Treinta y Tres 1 – River Plate 0
Goles: Manuel Barceló (TyT)
COMENTARIOS