El volante central fue campeón de Liga Mayor con San Lorenzo
Carlos Berden llegó al fútbol de San José en el año 2006, para jugar en River Plate, club en el que jugó durante más de cinco temporadas en dos pasajes diferentes. Fue campeón de liga en el 2009 con San Lorenzo, fue parte de la selección de San José en dos oportunidades, y la última camiseta que vistió fue la de Juventud Unida. Así recordó su travesía por el fútbol josefino en diálogo con 2 de Punta:
¿Cómo llegaste al fútbol maragato?
«Vinimos muchos jugadores que ascendimos con Rampla Juniors en el 2004 a la A profesional, no pudimos renovar y quedamos libres, en mi caso estuve todo el 2005 entrenando en la mutual pero no tuve posibilidades y en el 2006 me dice Juan Morán de ir a San José y rápidamente acepté. Yo quería jugar así que la idea de River Plate me gustó, y la verdad que más allá de alguna desavenencia que se dio con el paso de los años me han tratado muy bien y han cumplido con todo. Me encontré con una liga donde se corre mucho, a veces hay que utilizar mucha carpeta, en el primer par de meses me fui adaptando al ritmo hasta que me sentí bien. En el club me quedé tres temporadas, las del 2006 y 2007 fueron buenas y ya en el 2008 hubo algún problema y perdí el gusto de ir, estaba enojado y me tomé un respiro, en ese año perdemos la categoría. Con la euforia de volver a jugar no sentí en el inicio el tema de los viajes y las prácticas de noche, cuando van pasando los meses vienen las complicaciones, te acostumbras pero te pasa factura y sentís el achaque de combinar entrenamientos y trabajo».
¿Qué recordás del año 2009 en el que se logra la Liga Mayor con San Lorenzo?
«De cara al 2009 llegué a un acuerdo para no tener que jugar en segunda con River Plate, la idea era tranquilizar un poco las aguas, y además estaba confiado de que el club podía subir con lo que tenía. Tuve la oportunidad de ir a Universal y a San Lorenzo, elegí el azulgrana, en la primera charla ya el Gato Molina marcó que veníamos a salir campeones y yo que lo conocía apoyé totalmente. Las caritas eran de gente en la mayoría de los casos muy joven, era inimaginable lo que terminó pasando, creo que los que llegamos entramos bien en el plantel y eso fue clave. Fue muy importante el retorno al club de Pablo Cabrera, habíamos ganado los primeros dos partidos con dificultad y el llega en la tercera, hizo un montón de goles y ayudó a hacer otros tantos. Empezamos a encontrar una conexión grupal increíble, nos salía todo, nos mirábamos y sabíamos lo que había que hacer. Yo llegué con algunas fechas de suspensión, así que me tocó meterme en cancha desde la cuarta jornada para adelante, fue un torneo increíble que lo ganamos de punta a punta, corríamos todos de una manera increíble y se jugaba muy bien».
«Cómo fueron los años posteriores en River Plate, Juventud Unida y la selección?
«En el 2010 terminaba el préstamo y retorné a River Plate, yo me quería quedar en San Lorenzo que tenía Copa y defender el torneo local, la intención era seguir de largo pero no se llegó a un acuerdo entre los clubes. Antes jugué en la selección del verano de ese año, me había tocado también estar antes en el 2008, quizás deportivamente no tengo los mejores recuerdos pero sí del hecho de la compañía del público y de medirse con jugadores de otros departamentos. Me quedé en River otra vez varias temporadas, y dejé definitivamente en Juventud Unida en el año 2014, me llevó Gustavo Cabrera pero yo arrastraba varias jornadas de suspensión y estuve afuera cuatro fechas. En esos partidos no nos fue bien, al Cabeza lo echaron y vino otro cuerpo técnico, entré alguna vez desde el banco pero la realidad es que yo ya no estaba a nivel. Como deportista te tenés que dar cuenta que ya no cumplís los requisitos mínimos, traía varias lesiones y además la mente ya no quería nada, me desenchufé definitivamente y decidí no jugar más».
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