CON MATHIAS PALOMEQUE FUERA DE LA CONVOCATORIA, ARRANCÓ EL MUNDIAL PARA LOS TEROS
No se guardaron nada. Dieron todo lo que tenían para dar. Gastaron hasta la última gota de sudor ante una potencia y se fueron del mítico Millenium Stadium con la frente en alto.
Esos fueron Los Teros. Los uruguayos. La selección que menos jugadores profesionales tiene en su plantel. Esa que luego de 12 años volvió a codearse con la elite del rugby mundial y lo hizo con honores ante un Gales al que le costó encontrarle la vuelta al partido en su cancha y con su gente.
Nadie, salvo los jugadores, esperaba el inicio que tuvo el seleccionado uruguayo que salió a complicar a su rival, a jugar en campo rival y generar penales para ponerse en ventaja. Y fue soñado. A los 8’ de juego, Los Teros ganaban 6-0 con dos anotaciones de Felipe Berchesi.
Delirio de los uruguayos en Cardiff, en Montevideo y en todas partes del mundo. La Celeste le estaba ganando al local en su cancha.
La sorpresa fue tan grande que obligó a una rápida reacción de Gales, que demoró en ponerse en partido porque antes, no pudo hacerlo gracias al notable trabajo colectivo del equipo dirigido por Pablo Lemoine.
Es que Uruguay salió a hacer un planteo tan inteligente como efectivo y atrás quedaron las abismales diferencias entre un equipo y otro, esas que estaban sobre la mesa antes de comenzar el partido.
Pero los dragones rojos reaccionaron y con cuatro tries en la primera parte, se fueron al descanso 28-9 siendo Cory Allen la gran figura. Apoyó tres y se convirtió en el séptimo jugador en llegar a esa marca antes de los 23 años.
Los impecables primeros minutos de partido no se repitieron a lo largo del complemento en Uruguay. El esfuerzo hecho en los primeros 40’ jugó su papel y Gales pasó por arriba al seleccionado celeste en Cardiff.
La consecuencia de tries de los dirigidos por Warren Gatland, que guardó a varias de sus figuras pensando en el decisivo partido del próximo sábado frente a Inglaterra, terminaron sentenciando el encuentro a favor de Gales que selló el 54-9 final.
En el recuerdo de los jugadores uruguayos quedará ese pasillo de aplausos que le brindaron los galeses tras el esfuerzo hecho en el partido así como también las lágrimas al entonar el Himno Nacional en el Millenium Stadium.
Uruguay jugó con el corazón, mostró sus cartas y empezó a disfrutar del Mundial.
Info: ovacióndigital.com
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